Más del 76,6% de los invernaderos dispone de canalillas de invernadero, destinadas a la recogida del agua de la lluvia y la condensación.

En Almería la escasez de agua es uno de los factores que limita su desarrollo, de aquí la importancia de la implantación de canalillas de invernadero.

El agua que es utilizada en la agricultura significa dos tercios de todo el agua usada en el mundo.

Además, este porcentaje suele aumentar en  zonas áridas, como es el caso de Almería.

En Almería se sufre un fuerte déficit estructural de agua, que ha provocado un gradual agotamiento de los acuíferos.

Si a esto le sumamos la agricultara bajo invernadero, que ocupa unas 27.000 ha en la provincia,

generamos un grave problema de escasez de agua.

El incremento de los cultivos en invernadero ha provocado la necesidad de racionar el uso del agua.

Por lo que los ayuntamientos, se han visto obligados a crear ciertas normas para recoger el agua de la lluvia y la condensación.

Este agua es almacenada y posteriormente se utiliza para regar los cultivos.

Permitiendo regar los cultivos durante todo el año

Otro de los factores importantes en la creación de ciertas normas para recoger las aguas pluviales,

es el cambio de modelo de invernadero.

Los invernaderos de tipo plano absorbían el agua de la lluvia, esto no pasa con los de tipo de “raspa y amagado” y “multitúnel”.

Estos tipos de invernaderos provocan que el agua que cae sobre ellos vaya a los campos,

llegando a los núcleos urbanos.

Esto provoca graves daños en el campo y alrededores.

Ventajas de la recogida de aguas pluviales:

• Ahorra agua: Cada litro de agua recogida, reducirá la cantidad usada
• El agua de lluvia es gratis.
• El agua de lluvia contiene un nivel muy bajo de sales.
• La recogida de aguas pluviales reduce la erosión.

 

 

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